En la entrada de hoy queremos compartir con vosotros algunos pensaminetos y reflexiones que nos hemos ido planteando durante todos estos dìas en las Buenas Noches, ese ratito en el que nos reunìamos en la capilla antes de irnos a dormir, al igual que hacìa Don Bosco con sus muchachos.
Aquì van algunas palabras escritas desde nuestro corazòn.
Por las noches es cuando reflexionamos, pensamos en lo que hemos hecho en todo el dìa y decimos lo que nos ha gustado y lo que no.
Es el momento en el que màs te acuerdas de la familia y de la gente que tienes lejos, conocemos màs a las personas que tenemos alrededor.
A mì me gusta hacer las buenas noches aunque a veces este cansada y se me hace màs pesado, pero en realidad me gusta.
BESOSS.
Las Buenas Noches es uno de los momentos màs reflexivos del dìa, en el que cada uno es libre de compartir sus ideas, experiencias, pensamientos,etc.
Cada dìa es un Buenas Noches diferente a los demàs, no hay ninguno que sea igual.
Suele hacerlo Carlos, pero una semana nos tocò a cada uno tomar el mando cada dìa de la semana. En mis buenas noches hablè de los miedos y los valores que tenemos.
Les costò bastante pero al final cada uno poco a poco fue diciendo y compartiendo sus mayores miedos y su mayor valor en la vida, lo cual es bueno compartir de vez en cuando.
Este momento de la noche tambièn nos sirve para conocernos mejor los unos a los otros y tener un acercamiento a Dios.
Las Buenas Noches son imprescindibles, con ellas aprendemos màs a valorar las cosas que tenemos, las que hacemos y lo que queremos en la vida.
Fue una BUENISIMA idea por parte de Carlos hacerlas, ya que nos han mantenido unidos.
Espero que esto no desaparezca nunca dentro de nosotros porque es uno de los ratos màs emotivos de nuestra vida y no sòlo aquì sino siempre.
Saludos a todos.
Me gusta porque estamos en silencio, nos adentramos en otros pensamientos y lo que pensamos de verdad cada uno de nosotros. A mì me gusta decir las cosas claras y lo que pienso, aunque a mis compañeros les guste o no lo que pienso, cada uno tiene su forma de pensar y de ser y refleja la persona que es. Y tambièn me encanta ver como piensan los demàs para ver còmo son y còmo debo de ser o tratarme con ellos.
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En las Buenas Noches es el momento del dìa en el que cada uno comparte sus reflexiones, sus pensamientos, y sus sentimientos del dìa.
Tambièn sirve para conocer mejor a las personas con las que estamos conviviendo, como piensan, su forma de ser etc.
Tambièn es el momento de soltar todas tus preocupaciones y los sentimientos.
Este es un momento de reflexiòn para estar en "FAMILIA" por asi decirlo, cada uno de nosotros tenemos un momento donde reflexionamos, ya sea sobre el dìa, como estamos, como nos sentimos, etc... Un momento sobre todo de sinceridad, honestidad, humildad, y sobre todo y lo que màs caracteriza un momento "Salesiano" por el que estamos aquì y por lo que cada uno de nosotros nos representamos como personas, momento para estar fisica y mentalmente unidos, en poder hablar libremente sin temor a que te juzguen, ni que se rìan de tì, un momento en el cual pones tus sentimientos y pensamientos en una libertad explìcita .
En el tiempo de las buenas noches tenemos el silencio, aquel silencio que buscamos para poder reflexionar, aquel silencio que tenemos para acordarnos de nuetros seres queridos.....
A mì ese silencio me gusta mucho para poder acordarme de mi padre, mi madre, mis hermanos, mi familia en general; tambièn para acordarme de mis grandes amigos que me siguen esperando en Madrid, que les echo de menos.
Os quiero mucho.
Muchos besos, que ya queda poco para volver.
Una comunidad es un grupo de personas que rezan juntas; pero que también hablan juntas; que ríen en común e intercambian favores; están bromeando juntos y juntos están serios; están, a veces, en desacuerdo, pero sin animosidad, como se está, a veces, con uno mismo, utilizando ese raro desacuerdo para reforzar siempre el acuerdo habitual. Aprenden algo unos de otros o lo enseñan unos a otros. Echan de menos, con pena, a los ausentes. Acogen con alegría a los que llegan. Hacen manifestaciones de este u otro tipo, chispas del corazón de los que se aman, expresadas en el rostro, en la lengua, en los ojos, en mil gestos de ternura. Y cocinan juntos los alimentos del hogar en donde las almas se unen en conjunto y donde varios, al fin, nos son más que uno”.
(San Agustín, “Las confesiones”)